domingo, enero 31, 2010

EL CAMBIO SÚBITO DE IMAGEN DE LOS HAITIANOS: EL NUEVO ESTEREOTIPO


Niña Huérfana (foto: FAUSTINO PÉREZ)


Por FAUSTINO PÉREZ


Se considera al arquetipo como un modelo o paradigma, como podrían ser la obra pictórica conocida como la Maja de Goya del Museo del Prado en Madrid, o bien, la escultura de origen griego denominada la Venus de Milo, del Museo del Louvre de París. Ambas son arquetipos de belleza femenina. Es evidente que la mayoría negra de Haití, no era un arquetipo de belleza femenina, internacionalmente hablando.
Cuando el arquetipo es conocido y por lo tanto reconocido, hasta tal punto que con sólo mencionarlo, escucharlo o verlo, el interesado sabe de qué se está hablando, entonces, se le llama estereotipo. Por ejemplo, si se habla de un marciano, todo el mundo se lo imagina pequeño, de color verdoso, con la cabeza y los ojos grandes y con unas pequeñas antenas que le sobresalen por encima. El porqué del color verdoso de esos pequeñajos de ficción, carece de toda lógica en un planeta con predominio de los marrones y/o de los tonos rojizos. Pero así se le representa. En Haití los estereotipos más conocidos son el vudú y los zombis.
Algo similar ocurre con los nombres de las personas. No suscita la misma opinión una señora que se llame Bartolina, que una que tenga como nombre de pila el de Patricia. Cada nombre provoca una impresión previa en los interlocutores, es decir, antes de que la conozcan en persona, esto es inevitable. Eso también sucede con los nombres en francés y en créole. En Haití no es lo mimo el apellido Pié, el más corriente entre los pobres, que tener un apellido de origen francés, alemán, o libanés, como tienen muchos ricos de Pétionville.
No sólo existen estereotipos icónicos y lingüísticos, ya que se sabe que igualmente se producen en la música y en otras áreas del conocimiento. Una de las características de dichos estereotipos en comunicación, es que una vez establecidos son muy difíciles de cambiar o de modificar, aunque tienen la ventaja de que le ahorran tiempo al interesado.
¿Pero qué sucede?: geográficamente hablando La Española es una isla que pertenece a las Grandes Antillas del Mar Caribe, y está compartida por dos repúblicas: la República de Haití y la República Dominicana. La primera tiene algo más de 27 000 kilómetros cuadrados y se encuentra al oeste de la isla, y la segunda cuenta con más de 48 000 kilómetros cuadrados, al este. Por razones históricas Haití es una nación muy empobrecida, con uno de los índices de pobreza más altos del continente americano y del mundo, con elevadas tasas de analfabetismo. Ambos países tienen poblaciones similares, - en todo caso mal contadas - , de alrededor de nueve millones de habitantes cada uno. Esto significa una gran densidad poblacional.
A pesar de ser la nación pionera en América en la abolición de la esclavitud, en un país con una gran mayoría negra, y en lograr su independencia de Francia en 1804, - ese territorio que era rico en maderas preciosas hace siglos - , debido a la tala indiscriminada de árboles y a los extensos cultivos de la caña de azúcar, ha sido convertido en prácticamente un desierto en la mayor parte de su territorio montañoso. Debido a la ausencia de una capa vegetal que amortiguara las torrenciales lluvias tropicales, el agua se ha ido llevando el manto de tierra que quedaba arrastrándolo hacia el mar, lo cual ha incrementado la miseria por los pocos cultivos disponibles para alimentar su creciente población, con unos de los niveles de crecimiento más altos del mundo.
A raíz de la abolición de la esclavitud y de su separación de Francia, la nueva República de Haití quedó sumamente endeudada con la antigua potencia, por eso se ha dicho que Haití no logró su independencia, sino que la “compró”, o bien, que los franceses hicieron un estupendo negocio con Haití, y nunca pudo recuperarse totalmente por una serie de avatares históricos, incluyendo una sucesión de gobiernos que han empobrecido al país mucho más; y las intervenciones de potencias extranjeras a lo largo de su historia tampoco han logrado que Haití supere sus males seculares.
Religiosamente el país oficialmente tiene una mayoría que practica el catolicismo, sin embargo en la práctica es usual comprobar cómo las personas que dicen ser católicas, participan en ritos como el vudú, de origen ancestral africano. En los campos de Haití suelen escucharse a los lejos los tambores que delatan esas manifestaciones de religiosidad popular. Son proverbiales, igualmente, las historias de los llamados zombies o muertos vivientes, aparte de las prácticas de magia negra.
Si a lo anterior le sumamos un deficiente sistema de salud, con unos de los niveles de incidencia del VIH más elevados mundialmente, conjuntamente con numerosas enfermedades tropicales, incluyendo las endémicas que no han podido ser erradicadas, todo ello empeorado por una insuficiente alimentación de la gran masa de la población.
Para colmo de males, uno de los bordes de la placa téctonica del Caribe - la cual está interactuando constantemente y recibiendo presiones de cuatro placas: la placa de Norteamérica, la de Sudamérica, la llamada de Cocos y la placa conocida como Nazca - , pasa justo encima del norte de Haití, lo cual hace que el país sea muy propenso a sufrir terremotos, tal como aconteció el martes 12 de enero del 2010, a las 5:53 de la tarde (hora de Santo Domingo), de magnitud 7.0 en la escala de Richter.
Por otro lado, y para mayor inri, las construcciones que se realizaban en ese país, no estaban diseñadas para soportar movimientos telúricos, es decir, que no cumplían los estándares internacionales para lugares de alta sismicidad. Todo ello a pesar de que muchas de las residencias privadas estaban arquitectónicamente bien diseñadas, y estéticamente se veían bien, pero sus paredes no estaban reforzadas, o sea, que tenían problemas estructurales de resistencia con los materiales empleados. Esto se comprobó con el terremoto más reciente, ya que se cayeron como castillos de naipes, incluyendo las coquetas residencias de Pétionville en las faldas de las colinas que rodean la capital Puerto Príncipe. En esta localidad vivía un buen porcentaje de los haitianos de mayores ingresos, entremezclados con gente humilde que abarca la clase artesanal la cual le vendía sus productos a los turistas, principalmente.
En la ciudad de Puerto Príncipe ni siquiera el Palacio Nacional, la catedral, los ministerios, las escuelas, las iglesias incluyendo la catedral, las oficinas públicas, muchas de las embajadas, o el edificio que albergaba la ONU, se salvaron, debido a la chapucería al construir. Tampoco la propia residencia privada del Presidente de Haití René García Préval, pudo resistir el sismo.
Debido a esta situación calamitosa, uno no se explica por qué los funcionarios de los organismos internacionales de ayuda que se quedan de paso en Santo Domingo, se hospedan en los hoteles de cinco estrellas más caros de la capital dominicana. Otro asunto que es preciso destacar es que los primeros heridos en ser ingresados en los mejores hospitales dominicanos, fueron personalidades pudientes traídas en helicópteros; en cambio, los pobres eran internados en los hospitales de la frontera y llegaban en cualquier transporte imaginable; es decir, que no todos los damnificados eran iguales. Lo mismo ha ocurrido para los repartos de ayuda humanitaria en Puerto Príncipe.
El gobierno dominicano no sabe o no quiere estimar cuántos dominicanos, ni mucho menos cuántas prostitutas dominicanas fallecieron durante el terremoto; sin embargo, lo más probable es que perecieran varios miles. Otro problema lo constituyen los centenares de prisioneros que se escaparon de las cárceles el Puerto Príncipe y sus cercanías, y lo más probable es que crucen la frontera y terminen como ilegales en territorio dominicano.
De todas formas los cárteles internacionales y los contrabandistas de drogas están haciendo su agosto; al igual que los que trafican con armas, y los que se dedican al tráfico de personas y de órganos, ya que con el barullo fronterizo las actividades ilegales de todo tipo se facilitan, incluyendo el contrabando de combustibles. Se han descubierto haitianos “disfrazados” como heridos graves, para lograr burlar los controles en la frontera.
Ha de esperarse que hayan desalmados que se enriquezcan a costa del dolor del pueblo haitiano, y que logren desviar fondos recolectados y/o mercancías donadas, para lograr ventajas personales, esto es casi irremediable. Otros solicitan ayuda para los haitianos, y esos aportes voluntarios nunca llegan al pueblo de Haití. Otro problema lo constituyen las comisiones por donaciones realizadas por algunos bancos, lo cual ya ha provocado quejas en España. Aquí en país los oportunistas han empezado a especular con los precios de los productos comestibles alegando una escasez, y no es otra cosa que un desabastecimiento ficticio.
De lo que no cabe ninguna duda es que la apreciación que se tenía de los haitianos a nivel internacional ha cambiado súbitamente y en pocos días, a raíz de la gran hecatombe; de tal suerte que si antes se le veía como un pueblo que prácticamente “invadía” pacíficamente a sus vecinos, e incluso, la Guardia Costera de los EE UU los deportaba cuando eran atrapados en frágiles embarcaciones intentando llegar a las costas de la Florida, - lo contrario de lo que sucede con los cubanos - y que eran nacionales haitianos estereotipados como malolientes, feos y paupérrimos; ahora se les ve como un pueblo sufrido, merecedor de mejor suerte, y que ha sabido soportar la tragedia estoicamente y con dignidad. Ahora la extrema pobreza que padecía Haití durante generaciones, se considera como un “insulto” a la comunidad internacional.
Además, se destaca que fue la primera república negra del mundo en lograr su independencia en el 1804, y que la compra del territorio de Louisiana por parte de los Estados Unidos, se llevó a buen término gracias a los haitianos, ya que Napoleón no podía contar con una base en Haití, y tuvo que cambiar sus planes con respecto a Louisiana. Este hecho constituye una gran deuda histórica.
Ahora se han multiplicado las adopciones de niños haitianos huérfanos, e incluso se les trata como criaturas graciosas y adorables, dignas de recibir cariño, muy distante de la idea que se tenía de críos hambrientos y mocosos. Por otro lado, se les ha dado mayores facilidades a los haitianos en los EE UU para que puedan enviar remesas a su país de origen.
Tenía que ocurrir un cataclismo como el que aconteció en Haití para que se efectuara ese cambio en los estereotipos que se tenían. ¿Cuánto tiempo durará?, eso está por verse…

domingo, enero 24, 2010

“EN LA PELOTA SÍ SE GOZA”


CALENDARIO DE LAS PORRISTAS VENEZOLANAS DEL ESCOGIDO
(Fotos tomadas de: http://www.flickr.com/photos/joseamadoo/sets/72157623118746329/)

CALENDARIO DE LAS PORRISTAS VENEZOLANAS DEL ESCOGIDO

CALENDARIO DE LAS PORRISTAS VENEZOLANAS DEL ESCOGIDO

CALENDARIO DE LAS PORRISTAS VENEZOLANAS DEL ESCOGIDO (Fotos tomadas de: http://www.flickr.com/photos/joseamadoo/sets/72157623118746329/)

PROMOTORA DE LA BEBIDA 911 EN EL PLAY (Foto tomada de: http://www.flickr.com/photos/joseamadoo/4296209980/


Por FAUSTINO PÉREZ

“En la pelota sí se goza” dijo el fanático con aires de satisfacción al salir del Estadio Quisqueya, después de ser testigo de la victoria de su equipo favorito: los Leones del Escogido. ¡Había voceado y animado tanto a sus jugadores favoritos que estaba ronco y agotado!
Lo curioso del caso es que en esta isla nunca han existido leones, y lo mismo se podría decir de los Tigres del Licey, o de la Águilas Cibaeñas, o bien, de las Estrellas Orientales que tienen como emblema a un elefante. A estos cuatro equipos tradicionales del béisbol dominicano se han unido en los últimos tiempos, los Toros o Azucareros del Este, representados por unos animales que sí existen en la República Dominicana y fueron traídos por los españoles; y los Gigantes de Cibao, quienes no tienen ningún símbolo de la fauna, sin embargo, parodian a los Gigantes de San Francisco. En el 1989 desaparecieron los Caimanes del Sur por razones económicas; no les valió que de esos reptiles hay muchos en esta isla.
El béisbol es el deporte-rey en el país, ¡una auténtica pasión!, lo contrario de lo que sucede en otros muchos lugares del mundo donde predomina el fútbol; por ese motivo somos la tierra que más jugadores aporta desde al extranjero a las Grandes Ligas estadounidenses, conjuntamente con el Japón. Incluso varios de los equipos más conspicuos de ese país del norte han abierto academias aquí en nuestro territorio, como una forma de captar y entrenar al talento local. Es mucho lo que ha llovido desde que el pitcher Juan Marichal fuera exaltado al Hall of Fame de los EE UU y saliera en la portada de la revista TIME.
Ahora los padres animan a sus hijos a que practiquen el béisbol, y los acompañan a las prácticas de ese deporte, porque son plenamente conscientes de los jugosos salarios que se devengan en ese juego, en especial en las Grandes Ligas, algo impensable en los tiempos de Marichal.
En los alrededores de los estadios venden de todo, desde camisetas y gorras, hasta banderas con los colores de los equipos, pasando por los puestos de comida-chatarra. Concretamente en el Estadio Quisqueya, el de mayor capacidad del país, cachean a los que ingresan para evitar el acceso con armas de fuego. Y al entrar, tienen una tienda con toda la parafernalia deportiva que uno se pueda imaginar, incluyendo los famosos calendarios eróticos de las porristas o animadoras de los equipos.
Recientemente el equipo de los Leones del Escogido ha “importado” desde Venezuela unas chicas muy desinhibidas y atractivas para animar y enloquecer a sus hinchas como porristas; pero de la misma forma, otras franquicias tienen jóvenes muy sexys, las cuales anuncian desde bebidas para deportistas, o no, hasta pilas y baterías. De la misma manera, acuden decenas de muchachas en un afán exhibicionista al destacar sus atributos corporales; algunas de ellas tienen en mente la idea de que “lo que no se exhibe, no se vende”. Inclusive, hay fotógrafos que trabajan para la prensa especializada, que abarca desde páginas y blogs del internet, hasta otros medios como la televisión, que acuden al estadio exclusivamente a fotografiar a esas bellezas. Los que captan a los jugadores y sus jugadas son otros profesionales de la cámara, evidentemente.http://mendyenfigureo.com/,
Da gusto ver el cuidado y el primor que ponen los encargados para la puesta a punto del campo de juego antes de iniciar el partido, algo que contrasta con la chapucería que exhiben los obreros dominicanos habitualmente en otras áreas no recreativas. ¡Hasta suelen ser puntuales en el béisbol! Esto refuerza el criterio de que al dominicano lo que más le motiva es la diversión y el goce de la vida, abarcando la ludopatía, y por supuesto los vicios de todas clases, el sexo, el alcohol, en definitiva: el hedonismo. En las encuestas que se han hecho a nivel mundial, el dominicano está entre los nacionales más felices del mundo, a pesar del subdesarrollo y de las precariedades. En buena medida el béisbol es responsable de una cuota de esa felicidad.
En muchos aspectos el comportamiento en el estadio se parece al que muestra la gente en el carnaval dominicano, por el griterío, la música, el alboroto, los empujones a la salida, y los indeseados carteristas y descuideros. Es preciso destacar que en el estadio se expenden toda clase de bebidas gaseosas y alcohólicas, lo mismo que comidas rápidas como pizzas, perritos calientes, sándwiches, hamburguesas, y algunas frutas como uvas. Por otro lado aparecen oportunamente en el campo de juego, otras chicas sexys quienes lanzan camisetas con los colores de los equipos a los hinchas, y también regalan materiales inflables para animar a los jugadores, lo mismo que banderines y otros artículos desechables.
Cuando el equipo de uno está ganado, todo es alegría y sonrisas, pero en cambio si está perdiendo, sucede lo contrario; de todas formas, animando o insultando a los jugadores, o bien, discutiendo con los hinchas del equipo contrario, el público se desahoga. Es una de las terapias sociales más efectivas para eliminar el estrés. Por eso este deporte es apoyado desde el poder político sin ningún tipo de condiciones, por los políticos de turno.
Empero, lo bueno sucede cuando se termina la serie invernal, y los fanáticos salen a las calles y avenidas, durante prácticamente toda la noche, a celebrar el triunfo de su equipo favorito de una forma muy original y ruidosa: arrastrando con sus vehículos latas y cualquier otro utensilio metálico que produzca ruido.
De esa forma los que no son hinchas también tienen que participar, aunque sólo sea soportando el bullicio, porque como decimos aquí: “de pelota sabemos todos”; o mejor dicho: “la pelota la gozamos o la sufrimos todos”.

lunes, enero 18, 2010

FAUSTINO O EL LIBRO QUE SE LE PARECE




ACTO DE LA PUESTA EN CIRCULACIÓN DEL LIBRO MABÍ EN LAS VENAS EN EL MUSEO DEL HOMBRE DOMINICANO. De IZQ.A DER.: Adrián Javier, Marcio Veloz Maggiolo, Faustino Pérez, Manuel García-Cartagena.


MANUEL PEÑA, AIRSA GERMOSO DE PÉREZ, VICTOR ÁVILA, ANDRÉS L. MATEO 29AGO07 MUSEO DEL HOMBRE DOMINICANO

RAMÓN OVIEDO,Y YANELA HERNÁNDEZ


ZAIDY ZOUAÍN, Y GRISELDA LLOVERA

Texto Tomado de El Nacional
http://www.elnacional.com.do/semana/2010/1/16/37118/Faustino-o-el-libro-que-se-le-parece


PARA SABER MÁS:
librosdefaustinoperez.blogspot.com/

16 Enero 2010, 7:35 PM

Muchos son los casos en que la literatura funge como remedo de la historia, en que el arte verdadero dice más y revela mejor al hombre y su tiempo, que los aburridos folios académicos, o los pretendidos enfoques científicos

Escrito por: Adrián Javier (reodefuente@hotmail.com)

Hay quienes piensan que quienes escriben, sólo lo hacen para “explicarse el mundo”; o quizás, para que los amigos “lo quieran más”, como es el caso auto confesado del Nóbel colombiano Gabriel García Márquez (1927).

Otros opinan que el acto de la escritura creativa, entraña un arraigado sentimiento de ausencias, frustraciones y pesares inconfesados, aún no asumidos.

Los hay también, quienes consideran el oficio de la escritura con el fin predeterminado de su posterior publicación; como aberración intelectual, desenfado espiritual, atrevimiento social, y/o la más patética de las petulancias personales.

No dejan tampoco de aparecer quienes afirman, que el reverso idiosincrásico de los escribidores de toda laya, tema, ciencia y lugares del mundo; responde a una personalidad en permanente, fluida y renovada perplejidad; por la atención curiosa y pendenciera que prestan al ánima de las cosas, y a las acciones del hombre.

Hambrienta siempre de verdaderas primicias, provenidas de toda fuente y soporte; si algo caracteriza a este último rango referido -el de la personalidad en permanente y renovada perplejidad-, es la avidez de conocimiento con que se nos presenta –en todo medio-, su ser de extremos y consecuencias. Explorador apasionado en un mundo de alma virtual, superpuesto por razones insólitas, muchas veces de inédita complexión alegórica; carentes de simples envolturas cartesianas, mas sí, pletórica de símbolos subterráneos, referencias metafóricas sublimadas, signos emblemáticos subyacentes, como de manifestaciones icónicas aun sin clasificar.

Expresiones en clave revuelta, traspuestas en códigos invisibles, por inadvertidos, y sobre todo, aún ausentes de la catalogación serial común.

Estos modos diversos de ponderación, acerca de los procesos creativos que impulsan o signan el espíritu de algunos, para intentar a diario volcar las terribles interrogantes o las pequeñas y maleables certezas de la colectividad, en el acto de pura rebelión interna que supone la escritura, responden a una azarosa y sintomática veleidad, de la que es victima la propia masa procreante que le sirve de proyección y plataforma. Convirtiéndola en esa fuerza avasalladora e inconsecuente, que sufre el lujo de mostrar indiferencia frente a aquellos que practican un decir, soñando un hacer en libertad, que habría de volverse reflejo irrefutable de su entorno; filtro licuante de sus pesadillas y conquistas, fidedigna transparencia de sus anhelos y derrotas, cuando no, primoroso encause de sus esperanzas, cual médium conector del arte con la sociedad, testimoniante de las transformaciones infinitas ocurridas en el corazón del hombre común, cuando su esencia primaria es confrontada con el poder de la belleza.

Muchos son los casos en que la literatura funge como remedo de la historia. En que el arte verdadero dice más y revela mejor al hombre y su tiempo, que los aburridos folios académicos, o los pretendidos “exhaustivos” enfoques de científicos, sociólogos, catedráticos, investigadores, encuestadores, periodistas, politólogos, lingüistas o alicaídos “profesionales de la conducta humana”.

Y este es el caso del undécimo y más interesante libro de Faustino Pérez (1945), titulado con gracia y donaire conceptual: “Mabí en las venas” (Búho, 2007. 295 Pp.).

Siendo la última delación editorial de un artista polivalente, no es de extrañar que sea en el interior de su amplia bibliografía, el libro que más se le parece.

La obra es un compendio de asombros. La estructuran ensayos didácticos sobre las artes visuales, la literatura, la sociología, la cultura popular y la tecnología. Así como puntillosas reflexiones docentes sobre el discurrir massmediático de personalidades del espectáculo; una prosa imbuída por el extasis que producen los avances de la ciencia y la diaria progresión de la comunicación digital en la vida de los mass media, nacidos en el desequilibrio romántico del siglo pasado.

Mabí en las venas” se nos presenta como una loable y curiosa circunnavegación alrededor de los media; aquilata sus mensajes y reseña características inexploradas de sus protagonistas. Abarca además, los diferentes medios expresivos: la televisión, los periódicos, la radio, el internet, la publicidad y un largo, informativo y divertidísimo etcétera.

Se trata de un libro hablador y conceptuoso. Divertido, revelador, interactivo y vislumbrante. Diseñado por un escriba que intentó tallar a su medida un espejo de palabras que habrían de reflejar la imposible memoria de su desemejanza. Lo intentó seriamente y lo logró sin duda alguna. Lo hizo a su imagen y talento. Lo escribió tal como lo imaginó: bajo la égida del cuadrante del insomnio. “Mabí en las venas” es un libro escrito al socaire de la sensibilidad y el embeleso. Sus páginas están fermentadas con la expresa intención de hacer pensar en nuevas preguntas para un mundo desalmado, y sin respuestas satisfactorias ante lo inasible.

lunes, enero 11, 2010

EL MITO Y LA MAGIA DEL CARIBE EN LA OBRA DE TONY ARISTY

Obra de Tony Aristy (Cortesía de Artelista.com)

Tony Aristy en su taller (foto: FUENTE EXTERNA)


Por FAUSTINO PÉREZ

Tony Aristy el “alquimista” de la pintura, transmuta un utensilio casero - aparentemente banal y trivial - en algo poético y mágico pleno de mitologías. Es como si en la escoba se haya llevado un fragmento del trópico a su nueva morada en Rhode Island, o lo que es más, como si el alma de su terruño caribeño hubiese sido trasplantada por él a otras latitudes. ¡Todo un “contrabando” artístico-poético!
Como utensilio puramente artesanal, la escoba pertenece, sin lugar a dudas, al folklore material o ergológico, que abarca lo que se hace con las manos, según la clasificación de la gran folklorista venezolana Isabel Aretz, (Ver su obra: Manual del Folklore, pag. 85), en contraposición al folklore social que trata de las maneras de relacionarse que existen en la sociedad, y al folklore espiritual-mental, que se refiere a los vínculos y prácticas vinculados con los seres superiores y del más allá, y con las manifestaciones de índole espiritual.
Desde el punto de vista mitológico la escoba pertenece por derecho propio a los mitos cosmogónicos, que son aquellos que cuentan las leyendas del mundo material; diferentes de los mitos teogónicos, que relatan la historia de los dioses, narrando cómo estos vinieron a la existencia; o bien, de los mitos antropogónicos que explican las versiones del mundo humano.
Simultáneamente, el artista convierte a las escobas en todo un símbolo, porque representan otra cosa, ya que son utilizadas según las creencias populares para alejar, lo mismo, a los malos espíritus que a las personas indeseadas. En este contexto, el tema de las escobas dominicanas de Tony Aristy gusta y es apreciado en lares disímiles, algo aparentemente extraño teniendo en cuenta que se trata en su caso de una cultura anglosajona; sin embargo, cuando Aristy lleva sus trabajos a escenarios latinoamericanos, ahí sí es posible encontrar escobas como las dominicanas, y comoquiera son bien ponderadas.
Aún recuerdo cuando en sus años mozos, Tony Aristy empezó a dar sus primeros pasos en las técnicas pictóricas guiado por su mentor Pedro Céspedes, de la escuela fotorrealista dominicana; empero ya en su adultez, Tony Aristy el creador profesional, ha seguido volcando cada vez más todo su amor y toda su pasión sobre la tela cuando plasma con su pincel cada filamento de su tema preferido.
El fotorrealismo es un movimiento esencialmente pictórico que surgió en los EE UU en la década de los años 60 del siglo pasado. La idea consistía en pintar de tal forma que la imagen se pareciese lo más posible a una fotografía, con todas las distorsiones y aberraciones producidas por las diferentes lentes, si se produjera el caso. Ya se sabe que el gran angular fotográfico capta el espacio más curvo que el verdadero, y tiende a deformar y ensanchar la imagen, además, las líneas rectas aparecen combadas; por su lado, el teleobjetivo, saca una foto “aplastada”, con sus planos comprimidos, por decirlo así, pero con la ventaja de que las líneas rectas aparecen derechas. Todo lo anterior amén de otras propiedades como los reflejos en la óptica, causados por los contraluces.
En el mismo fotorrealismo hay quienes realizan los bocetos a base a proyecciones sobre el lienzo, en cambio, otros pintan del natural con el objeto-sujeto presente, como es el caso de Tony Aristy, aparte, de que él les retorna a los estadounidenses la técnica que idearon ellos, pero resemantizada, con elementos y utensilios caribeños, específicamente dominicanos.
En los Estados Unidos los más conspicuos representantes de la escuela fotorrealista son Chuck Close y Richard Estes. El primero realiza retratos enormes de caras normalmente inexpresivas, y el segundo pinta habitualmente escenas callejeras, con luces reflejadas en superficies metálicas y/o en cristales. Existen otros cultores del fotorrealismo quienes suelen especializarse en un tema favorito, como podrían ser: los camiones, las luces de neón, los caballos, fachadas de restaurantes, y así en ese tenor.
Tan importante como la temática en sí misma, es el dominio que tiene Aristy de las sombras que proyectan las escobas; es como si el cultor provocara un diálogo interminable, entre su referente que es algo tangible en la realidad, y lo inmaterial y cambiante como es la proyección de la luz sobre el objeto, en este caso, la escoba. Prácticamente plantea un dilema filosófico entre el aquí-ahora y el allá-después, ya que en esta “contradicción” icónica el aquí sería la escoba misma, y el allá vendría a ser la sombra de ella. De paso le añade un toque mágico, misterioso y místico a su producción. No obstante, cuando Tony Aristy inmortaliza un fragmento de la escoba, entonces, puede convertir la pieza en algo casi abstracto, con todas esas sinusoides creadas por las especificidades del tema.
Aparte de sus escobas, el creador cultiva otros tópicos de su nativa República Dominicana, siempre tratados de manera intimista, y cuasi-romántica, potenciados en el misterio, el misticismo y la espiritualidad; de tal suerte, que el espectador tiene que deducir la presencia del ser humano indirectamente a través de los avíos y bártulos, creados por hombre. Y como todo lo misterioso posee su rito, sus objetos devienen en sujetos de los rituales caseros y de otras actividades, según el utensilio de qué se trate.
Cuando están recostadas en la pared, o bien, colocadas en el suelo, esas escobas parecen entidades con vida propia; da la impresión de que al mirarlas uno las va a importunar y a molestar. Aunque me temo que eso es precisamente lo que quiere su creador, que uno las incomode con la mirada y que las quiera para sí, ¡qué
provocación!, o mejor dicho, ¡qué provocador!

domingo, enero 03, 2010

PROPUESTA AL RECTOR DE LA UASD

Noche estrellada (fractal: Faustino Pérez)



Santo Domingo
4 enero 2010

Dr. Franklin García Fermín

Rector Magnífico, - con reparos - , de la Universidad Autónoma de Santo Domingo
Conocido lector de sopas de letras del comedor de la UASD
Condecorado por el Gobierno de Venezuela por sus brillantes aportes a la sociedad
Profesor Meritísimo que impartía docencia leyendo del texto
Promotor de la incultura uasdiana
Miembro prominente de la Academia de Ciencias por sus méritos como jurisconsulto
Viajero incansable que pasea su estulticia por el mundo con los recursos propios
Sempiterno candidato a mequetrefe
Protector de turbas y encapuchados
Pirómano del refugio de haitianos
Experto en Nuevas Tecnologías aplicadas para desacreditar a los profesores
Especialista en tráfico de influencias
“Botellero” mayor de la república
Acomplejado bipolar sin rumbo
Patrocinador de caravanas proselitistas con fondos suyos
Gran orador paradigmático
“Payolero” implacable de los medios y del estamento judicial
Administrador escrupuloso de los presupuestos ajenos y propios
Estafador consuetudinario
Instrumentalizador de Bill Clinton en afiches
Preservador insigne del “tigueraje”
Monumento a la inmoralidad
Bastión del partidismo universitario
Modelo de transparencia contable
“Ñame con corbata”
Premiador de ladrones del patrimonio
Cabeza del nido de víboras
Azote del Colegio de Abogados
Defensor incansable de la UASD y de los valores humanos
Secuestrador de los resultados del claustro
Famoso plagiador de textos jurídicos
Paradigma para el estamento estudiantil de lo que no se debe hacer

Distinguido Sr. Rector Magnífico:

Con todo el gran respeto que usted se merece y después de saludarle cordialmente, aprovecho la oportunidad para desearle un venturoso año 2010. Aún está fresca en mi memoria la gentil llamada que me hizo el año pasado en enero, para felicitarme con motivo de mi cumpleaños, mientras simultáneamente patrocinaba las turbas en Humanidades en contra mía, en contubernio con el analfabestia Rafael Morla y el esquizofrénico Yovanny Matos, todo un modelo de honestidad y vergüenza el suyo.
En vista de sus múltiples méritos arriba mencionados, quería sugerirle amistosamente que se declarara el nuevo año 2010, como el AÑO DEL CHUPACABRAS DE LA UASD; es más aún voy más lejos, que se declare al “animal raro” como MASCOTA OFICIAL de la “Universidad” mientras dure su provechosa gestión, y de paso que le sirva a usted como emblema indeleble, es decir, como “BACÁ” para sus futuras candidaturas en su brillante carrera política, plena de indudables logros y desfalcos. No estaría mal que se le erigiera una estatua al chupacabras justo en la explanada de la rectoría, pero a un lado, para que no compita con la exuberante Madre Nutricia, su gran patrona.
Quiero confesarle que me siento anonadado por su indetenible proyección trascendental, y por haber hecho de la UASD un auténtico refugio de vagos y maleantes, quienes devengan salarios superiores a los que trabajan con dignidad. Ojalá pronto pueda extrapolar esas prácticas eficientes y dignas de elogios, para aprovechamiento de otras instituciones.
Hago votos para que mi propuesta pueda llegar a un feliz término, cuya aprobación sería un insuperable regalo de Reyes, y le reitero como siempre mi máxima consideración y estima.
Se despide de usted atentamente su querido hermano y amigo:

Lic. Faustino Pérez